La metamorfosis de Simeone
Cuando parecía que este 2020 no podía sorprendernos más, todavía faltaba el momento Cholo Simeone. Tras años moviéndose en la rigidez de su 1-4-4-2, que le llevó a los grandes éxitos de la historia rojiblanca (2 finales de Champions League y una liga), el argentino se ha dado cuenta de que ha llegado el momento del cambio y sorprendentemente ha decidido cambiar de esquema. Del 4-4-2 al 3-5-2 (o 5-3-2 en defensa).
El Atlético tiene a uno de los grandes talentos del fútbol mundial. Como en toda relación, el primer paso es adaptarse. Los primeros meses de Simeone y Joao Félix no fueron los deseados por la parroquia colchonera, pero actualmente su historia de amor está en su mejor momento. Si quieres que tu relación triunfe, debes adaptarte a tu pareja. Eso ha hecho Simeone. Ha modificado su libreto para darle al Golden Boy todo lo que necesita para ser el futbolista diferencial que lleve al Atlético a lo más alto. La razón de todo este cambio es el portugués. Joao Félix ahora tiene los espacios que no tenía la temporada pasada, y el “Menino de Oro” está respondiendo con creces.
El cambio no fue brusco. Simeone empezó la temporada como siempre, con su 4-4-2. Pero con el paso de los partidos, su sistema empezó a evolucionar a un 4-3-3, con Joao Félix en el sector izquierdo pero con libertad para caer para dentro y Luis Suarez luchando con los centrales rivales para liberar de marcas al portugués. Pero en el partido ante el Cádiz Simeone apostó por una defensa de 3, formada por Giménez, Savic y un Hermoso que hasta ese momento casi no había contado nada para el entrenador argentino. Ese partido fue un punto clave en el idilio entre los dos ídolos del Metropolitano. Joao Félix acabó el encuentro con 2 goles y una asistencia. Desde ese momento, el Cholo no ha vuelto a tocar el sistema.
Lo único que le está faltando al Atlético es remate. Lo que necesita es al “Pistolero”. En el parón de selecciones posterior al partido ante los gaditanos, Luis Suarez dió positivo en covid-19 y todavía no ha podido volver a los terrenos de juego. Y a pesar de no tener todo el remate que te da el uruguayo, los colchoneros siguen ganando. Pero Simeone necesita al uruguayo para rematar todos los pases de gol que reparte Llorente cuando cambia de ritmo y rompe dirección a la línea de fondo. Félix puede hacer eso, pero pierdes todo lo que te da en otras zonas del campo. El portugués está acompañando al punta, con mucha libertad para caer a banda izquierda e intentando estar lo menos en contacto posible con los centrales rivales, tarea de la que se encarga su acompañante. Y ahí se está saliendo.
Simeone ha visto cosas que nosotros hace meses ni nos imaginábamos. Carrasco como carrilero izquierdo, siendo un puñal desde su banda; Hermoso dando un gran nivel defensivo y cubriendo fantásticamente la espalda del belga cuando sube al ataque; incluso haciendo que Lemar juegue el mejor partido desde que llego a Madrid. Todo parece a favor para que este Atlético vuelva a hacerse con el título 7 años más tarde. El genio argentino ha sabido evolucionar para volver a triunfar. Ha pasado de la delantera Villa-Costa a estar totalmente enamorado de Joao Félix. Esta historia de amor va camino de tener el mejor final posible. Y Simeone y Joao Félix comerán perdices.